(1) Pon el cuerno en tu boca. Como buitre viene contra la casa de YIHWEH; porque transgredieron mi pacto y transgredieron mi ley. (2) ¿Clamarán a Mí: ‘Dios mío, nosotros Israel te conocemos’? (3) Israel ha desechado lo bueno; el enemigo lo perseguirá. (4) Han puesto reyes, pero no de mí, han puesto príncipes, y yo no lo sabía; De su plata y de su oro se hicieron ídolos para ser talados. (5) Tu becerro, oh Shomrón, es desechado; Mi ira se ha encendido contra ellos; ¿Cuánto tiempo pasará antes de que alcancen la inocencia? (6) Porque de Israel también es esto: el artífice lo hizo, y no es Dios; sí, el becerro de Shomrón será quebrado en escalofríos. (7) Porque siembran viento, y torbellino cosecharán; no tiene tallo, la yema que no dará harina; si así es, cede, los extraños se la tragarán. (8) Israel es devorado; ahora han llegado a ser entre las naciones como un vaso sin valor. (9) Porque han subido a Asiria, como asno montés solo; Efraím contrató amantes. (10) Sí, aunque alquilen entre las naciones, ahora los recogeré; y comienzan a disminuir a causa de la carga del rey y de los príncipes. (11) Porque Efraím ha multiplicado altares para pecar, y le han sido altares para pecar. (12) Aunque nunca escribo para él tantas cosas de mi ley, son consideradas como si fueran de un extraño. (13) En cuanto a los sacrificios que se me hacen por fuego, sacrifiquen carne y coman, porque YIHWEH no los acepta. Ahora se acordará de su iniquidad y castigará sus pecados; volverán a Egipto. (14) Porque Israel se olvidó de su Hacedor y edificó palacios, y Iehudá multiplicó ciudades fortificadas; pero enviaré fuego sobre sus ciudades, y devorará sus castillos.