DE VEINTICINCO años era Amasías cuando comenzó a reinar, y veintinueve años reinó en Ierushaláim: el nombre de su madre fué Joaddan, de Ierushaláim.
Hizo él lo recto en los ojos de YHVH aunque no de perfecto corazón.
Y luego que fué confirmado en el reino, mató a sus siervos que habían muerto al rey su padre;
Mas no mató a los hijos de ellos, según lo que está escrito en la ley en el libro de Moshé, donde YHVH mandó, diciendo: No morirán los padres por los hijos, ni los hijos por los padres; mas cada uno morirá por su pecado.
Juntó luego Amasías a Iehudá, y con arreglo a las familias púsoles tribunos y centuriones por todo Iehudá y Biniamín; y tomólos por lista de veinte años arriba, y fueron hallados en ellos trescientos mil escogidos para salir a la guerra, que tenían lanza y escudo.
Y de Israel tomó a sueldo cien mil hombres valientes, por cien talentos de plata.
Mas un varón de Dios vino a él, diciéndole: Rey, no vaya contigo el ejército de Israel; porque YHVH no es con Israel, ni con todos los hijos de Efraim.
Pero si tú vas, si lo haces, y te esfuerzas para pelear, Dios te hará caer delante de los enemigos; porque en Dios está la fortaleza, o para ayudar, o para derribar.
Y Amasías dijo al varón de Dios: ¿Qué pues se hará de cien talentos que he dado al ejército de Israel? Y el varón de Dios respondió: De YHVH es darte mucho más que esto.
10 Entonces Amasías apartó el escuadrón de la gente que había venido a él de Efraim, para que se fuesen a sus casas: y ellos se enojaron grandemente contra Iehudá, y volviéronse a sus casas encolerizados.
11 Esforzándose entonces Amasías, sacó su pueblo, y vino al valle de la Sal: e hirió de los hijos de Seir diez mil.
12 Y los hijos de Iehudá tomaron vivos otros diez mil, los cuales llevaron a la cumbre de un peñasco, y de allí los despeñaron, y todos se hicieron pedazos.
13 Empero los del escuadrón que Amasías había despedido, porque no fuesen con él a la guerra, derramáronse sobre las ciudades de Iehudá, desde Shomrón hasta Bet Jorón, e hirieron de ellos tres mil, y tomaron un grande despojo.
14 Regresando luego Amasías de la matanza de los Idumeos, trajo también consigo los dioses de los hijos de Seir, y púsoselos para sí por dioses, y encorvóse delante de ellos, y quemóles perfumes.
15 Encendióse por tanto el furor de YHVH contra Amasías, y envió a él un profeta, que le dijo: ¿Por qué has buscado los dioses de gente, que no libraron a su pueblo de tus manos?
16 Y hablándole el profeta estas cosas, él le respondió: ¿Hante puesto a ti por consejero del rey? Déjate de eso: ¿por qué quieres que te maten? Y al cesar, el profeta dijo luego: Yo sé que Dios ha acordado destruirte, porque has hecho esto, y no obedeciste a mi consejo.
17 Y Amasías rey de Iehudá, habido su consejo, envió a decir a Ioash, hijo de Joachâz hijo de Iehu, rey de Israel: Ven, y veámonos cara a cara.
18 Entonces Ioash rey de Israel envió a decir a Amasías rey de Iehudá: El cardo que estaba en el Levanón, envió al cedro que estaba en el Levanón, diciendo: Da tu hija a mi hijo por mujer. Y he aquí que las bestias fieras que estaban en el Levanón, pasaron, y hollaron el cardo.
19 Tú dices: He aquí he herido a Edom; y tu corazón se enaltece para gloriarte: ahora estáte en tu casa; ¿para qué te entrometes en mal, para caer tú y Iehudá contigo?
20 Mas Amasías no quiso oir; porque estaba de Dios, que los quería entregar en manos de sus enemigos, por cuanto habían buscado los dioses de Edom.
21 Subió pues Ioash rey de Israel, y viéronse cara a cara él y Amasías rey de Iehudá, en Beth-semes, la cual es de Iehudá.
22 Pero cayó Iehudá delante de Israel, y huyó cada uno a su estancia.
23 Y Ioash rey de Israel prendió en Beth-semes a Amasías rey de Iehudá, hijo de Ioash hijo de Joachâz, y llevólo a Ierushaláim: y derribó el muro de Ierushaláim desde la puerta de Efraim hasta la puerta del ángulo, cuatrocientos codos.
24 Asimismo tomó todo el oro y plata, y todos los vasos que se hallaron en la casa de Dios en casa de Oved-edom, y los tesoros de la casa del rey, y los hijos de los príncipes, y volvióse a Shomrón.
25 Y vivió Amasías hijo de Ioash, rey de Iehudá, quince años después de la muerte de Ioash hijo de Joachâz rey de Israel.
26 Lo demás de los hechos de Amasías, primeros y postreros, ¿no está escrito en el libro de los reyes de Iehudá y de Israel?
27 Desde aquel tiempo que Amasías se apartó de YHVH, maquinaron contra él conjuración en Ierushaláim; y habiendo él huído a Lajish, enviaron tras él a Lajish, y allá lo mataron;
28 Y trajéronlo en caballos, y lo sepultaron con sus padres en la ciudad de Iehudá.